Es necesario un profundo descubrimiento gozoso de lo que somos. Cuando logramos des-identificarnos del ego, cuando descubrimos nuestro valor como persona, cambia mi mirada sobre los otros. Ya no puedo tratarlos como instrumentos, como robots, como recursos.
Es posible crear organizaciones donde los seres humanos podamos vernos unos a otros con toda nuestra grandeza, con todo nuestro potencial. Es posible salir de una relación donde nos vemos unos a otros como instrumentos, como cosas, como recursos para lograr un fin.